martes, 10 de diciembre de 2013

Niños con Parálisis Cerebral (IV)

¡BUENOS DÍAS A TODOS!
Ayer os hablaba sobre el segundo aspecto del trabajo de Josefa Lacarcel: LA VOZ .

Hoy sigo con el tercer aspecto de su trabajo: RITMO Y MOVIMIENTO.

-RITMO Y MOVIMIENTO: 
Estos dos elementos son también muy importantes en el desarrollo de la terapia, pero para que sea verdaderamente provechoso es necesario considerar en primera instancia la posición del paciente. Para esto debe resguardar que su cabeza esté ubicada en línea media lo que favorecerá la actividad bilateral de las manos. "Las pautas flexoras o extensoras deben ser controladas con una forma de sentarse adecuada y en el caso de que sean necesarios unos aparejos extensivos, se debe procurar que sean lo más pequeños posible y debe permitirse al niño que ejerza aquel tipo de control que tenga sobre esa postura".

A través del trabajo con el ritmo y el movimiento el niño puede tomar conciencia de sus propias posibilidades corporales. Estos elementos pueden ayudar a la persona a forma una imagen mental del movimiento produciendo sonidos asociados a una emoción. El incorporar el movimiento con la emoción permite que el trabajo terapéutico no solo se centre en lo que el paciente percibe, sino también en su aspecto débil: lo que puede ver de la otra persona.


Pero esto no evita que se trabaje lo motor, pero hace que no se pierda de vista la integridad del ser humano, que no es solo cuerpo, músculos, extremidades...sino también sentimientos, emociones, sueños, temores....Estos últimos elementos son posibles de contener desde la música, el ritmo y el movimiento. NO SON AJENOS A UNA PERSONA CON PARÁLISIS CEREBRAL.



Mañana os hablaré del último aspecto del trabajo de Josefa Lacarcel: los instrumentos.

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