jueves, 28 de noviembre de 2013

Cromoterapia en estética (II)

¡Buenos días chicos!!!


Hoy vamos a seguir con la última parte de la cromoterapia en estética. En esta entrada en concreto os voy a explicar los beneficios de los principales colores que se utilizan.


El tratamiento se aplica tal cual vemos en esta foto.



En función de su longitud de onda, la luz LED puede tener interesantes cualidades:




Luz azul (415nm): Posee acción bactericida. Al incidir en el tejido superficial donde se concentra la porfirina (sustancia que favorece la formación de bacterias) estimula la producción de radicales libres que se encargan de destruir dichas bacterias, por lo que es ideal para interrumpir el proceso del acné.




Luz verde (530 nm): Tiene efectos calmantes y relajantes, por lo que es recomendable para la ansiedad y depresión. Mejora el funcionamiento glandular, disminuye el acné y manchas.


Luz amarilla (590 nm): A nivel de tejido medio, su efecto es rejuvenecedor y drenante. Ayuda a difuminar arrugas, aumenta la luminosidad cutánea, unifica el tono de la piel y atenúa las manchas.



Luz roja (660 nm): Estimula la circulación sanguínea, incrementa la producción de colágeno y elastina, revitaliza las células. Idónea para tratamiento de celulitis, reduce arrugas y manchas de acné.



Luz ámbar (566 nm): Mejora la absorción de oxigeno, estimula la circulación sanguínea y ayuda a la piel y a la digestión.



Luz violeta (380 nm): Tiene un gran poder antiséptico y estimula la regeneración de la piel.



Espero que os haya servido esta información y os haya gustado!!
Hasta mañana :)

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